Todos a una por el futuro laboral de los jóvenes con cardiopatía
España es uno de los países miembro de la Unión Europea con peores datos de desempleo entre los menores de 25 años. La actual crisis sanitaria, social y financiera provocada por la covid-19 ha vuelto a retorcer más, si cabe, un mercado laboral muy dañado y en el que los jóvenes que buscan su primera experiencia laboral son uno de los colectivos más afectados.
Para los jóvenes con cardiopatías congénitas, esta primera oportunidad de empleo puede llegar a ser aún más inalcanzable, pues a la escasez de experiencia profesional a causa de su edad hay que añadir otras variables en contra. Entre ellas, que su patología crónica limite el rango de puestos que pueden desempeñar; tener una discapacidad; un cambio profundo en las estrategias de selección de las compañías; que el mercado laboral se caracterice por ofertas cada vez más especializadas; el desplome de sectores clave como la hostelería y el comercio; o que haya una escasa adecuación entre su formación y lo que demandan las empresas.
Por ello, desde Menudos Corazones, pusimos en marcha a comienzos de 2021 nuestro Recurso de Orientación Sociolaboral. Su objetivo es ofrecer orientación, apoyo, intervención y acompañamiento a jóvenes con cardiopatías congénitas en su itinerario de búsqueda de empleo.
Para estar «todos a una» por el futuro laboral de este colectivo, entidades como la Fundación Sage apoyan este nuevo proyecto de Menudos Corazones. Por ello, el 16 de febrero, ofrecimos a más de 100 empleadas y empleados de esta empresa una sesión de sensibilización en la que pusimos sobre la mesa estas enormes dificultades de inserción laboral y agradecimos el apoyo brindado por la Fundación Sage a este necesario recurso.
En el evento participaron Mercedes Sevillano, socia, madre de un niño con cardiopatía e integrante del Comité de Comunicación y Captación de Fondos del patronato de Menudos Corazones; Bernardo García, joven de la Fundación, participante del programa; y Begoña San Narciso, nuestra responsable de captación de fondos.
¡Gracias, Fundación Sage!
